Tips para que tus hijos te ayuden con las labores domésticas sin tener que regañarlos
A la hora de criar a un hijo o hija, muchas madres se enfrentan a la inseguridad acerca de si lo están haciendo bien o mal.
Uno de los aspectos más complejos es cómo pedirle a los hijos que ayuden con los quehaceres de la casa. Afortunadamente, los especialistas en crianza tienen algunos tips para hacer esto mucho más sencillo, tanto para los padres como para los niños.
#1 Define la tarea según la edad
Lo primero es definir en qué te pueden ayudar tus hijos, según su edad. Esto es muy importante, ya que no quieres dejarles tareas que los aburran o les parezcan imposibles de cumplir.
Contrario a lo que muchos padres piensan, los niños pueden tomar responsabilidades en la casa desde una edad muy temprana.
Web MD señala que los menores de 2 y 3 años pueden ayudar con actividades como recoger sus juguetes, llenar el plato de comida de una mascota, poner la ropa sucia en el cesto, limpiar líquidos derramados o apilar libros y revistas.
Entre los 4 y 5 años pueden incluirse tareas como hacer la cama, vaciar los botes de basura, limpiar la mesa, regar las plantas y prepararse un plato de cereal.
Los niños de entre 6 y 7 años tienen la capacidad de dividir la ropa sucia entre blancos y colores, barrer, poner y limpiar la mesa a la hora de comer y hasta mantener su cuarto limpio y ordenado.
A partir de los 8 y 9 años, los menores son capaces de lidiar con tareas más complejas, como guardar la comida del supermercado, barrer y ayudar a preparar ciertos alimentos, como tostar un pan o hacer una ensalada de frutas.
Los niños mayores de 10 años ya pueden ayudar en muchas más tareas de la casa, como doblar la ropa limpia, lavar ventanas o el carro, limpiar la cocina, poner la lavadora y cambiar sus sábanas.
#2 Hacer la tarea con él o ella
Al igual que ocurre con cualquier otro aprendizaje, tu niño o niña se sentirá más seguro y motivado si las primeras veces que realiza una tarea en la casa estás a su lado.
Con esto, podrás explicarle cómo hacer cada paso, así como aplaudir sus avances hasta que domine por completo la actividad.
#3 Sé específica
Una de las razones más frecuentes por la que los niños se desentienden de sus obligaciones en la casa es que reciba una indicación poco clara, menciona Web MD.
Si le dices «limpia tu cuarto» él o ella podría interpretar diferentes cosas, así que procura pedirle acciones más puntuales como «pon tus juguetes en su lugar, haz tu cama, barre o trapea tu cuarto».
#4 La regla del cuando/entonces
Elizabeth Pantley, autora de libros sobre crianza, señala que una gran técnica para recordarle a un niño en qué momento debe cumplir con sus deberes es la de cuando/entonces.
Con esta norma le dirás a tu hijo: «Cuando termines de hacer tu cama, entonces podrás salir a jugar» o «Cuando termines de limpiar la cocina, entonces podrás ver la televisión».
#5 Celebra cada que termine una tarea
Si aún es pequeño y estás empezando a involucrarlo en las tareas del hogar, sentirá una motivación especial si celebras su participación, según Raising Children Network.
No significa que debes hacer una gran fiesta por cada cosa que haga, puede ser un simple agradecimiento o comentario positivo acerca de lo importante y benéfico que fue para toda la familia su aportación. Esto, además, ayudará a reforzar su autoestima.
#6 Haz un tablero
Una forma sencilla de recordar y especificar las tareas de todos los integrantes de la familia es con un tablero.
Debe tener columnas para designar quién debe realizar cada actividad, en qué consiste, una hora o momento del día en el que debe hacerlo y una manera de marcar si ya la cumplió (o la recompensa que ganó por lograrla).
Pueden decorarlo entre toda la familia, agregando colores llamativos, dibujos y hasta casillas móviles. ¡Será como un gran juego para todos!
#7 Dale recompensas
De acuerdo con Raising Children Network, tu pequeño se sentirá más motivado si sabe que, al final del día o de la semana, podrá recibir una recompensa por su trabajo en la casa.
El premio debe ser pequeño, ya que la idea es que su comportamiento no esté condicionado por un factor externo. Puede ser ir al parque un par de horas, tener una comida especial con toda la familia o simplemente escoger una película o programa de televisión.
#8 Olvídate de "pagarles" por ayudar en casa
Hablando de recompensas, diversos expertos en crianza coinciden en que es importante que no sean monetarias.
Para empezar, los niños más pequeños no necesariamente entenderán el valor de que les “pagues” por ayudar en la casa, por lo que no se sentirán motivados a hacer las tareas que les asignes.
Además, al darles dinero por ayudar en casa, puede que distorsionen el hecho de que son parte de su responsabilidad dentro de la familia y no es un trabajo extra.
Eso, sin contar que se puede prestar a regateos por su parte, acerca de cuánto vale cada una de sus tareas.
¿Cuál de estas técnicas será la que utilices para que tus hijos te ayuden en casa?
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