
¿Alguna vez te sentiste culpable de algo que hiciste o no hiciste? Ya no, deja las cosas en el pasado. Además, todos a cierta edad sentimos el derecho (o necesidad) de hacer lo que queremos, sin rendirle cuentas a nadie. Ni siquiera a nosotros mismos.
Comenzamos lo que seguro será una larga lista de cosas por las que ya no debes culparte. Echa una mirada, ¡y complétala a tu gusto!
Decir no a algunos planes
Todos necesitamos tiempo a solas, o elegir con quién pasar nuestro tiempo. Si no deseamos compañía, o esa en particular, tenemos todo el derecho a decir que no y aprovechar nuestros momentos en soledad.
Tu mejor amiga actúa extraño
No supongas que su comportamiento tiene algo que ver contigo. Ella tiene toda una vida aparte de su amistad, y quizás le haya sucedido algo por lo cual reacciona de esa manera. Existe una mayor probabilidad que no haya sido tu culpa, y si no, seguramente ya lo sabes.
No llamar a tus padres lo suficiente
No existe una definición de “suficiente” para establecer los llamados a los padres. Si de esa manera funciona para ti, así seguirá.

Derrochar tu dinero
Si en vez de invertir tu dinero en ahorros o mejoras en el hogar, prefieres hacerlo para pagarle a alguien te realice la limpieza por ti, no tienes por qué sentirte culpable. Eres adulta y se supone que tu sueldo es para hacer tu vida más sencilla.
Comer postres
Darse el gusto de comer postres, chocolates o cualquier otra delicia no tiene por qué hacerte sentir culpable. Es tu cuerpo, nadie tiene derecho a opinar.
Faltar a un evento importante de tu amiga
Tu amiga festeja su cumpleaños, y tú no estás de ánimo para estar allí, o has decidido tomarte unas vacaciones y coinciden las fechas. No lo pienses dos veces, siempre has tenido y tendrás oportunidades para seguir acompañando a tu amiga, pero esta ocasión no lo es.

Permanecer en el departamento un día soleado
Días soleados en otoño o invierno no los hay mucho, pero cuando sucede, no tienes razón para sentirte culpable si prefieres quedarte dentro de tu departamento en vez de salir a disfrutar del hermoso día.
Invertir en un viaje
Gastar una buena cantidad de dinero en un viaje que te hace feliz debe distar mucho de hacerte sentir culpable. A veces, el dinero puede comprar la felicidad, además, nadie te quitará los lindos recuerdos.
Dormir en vez de hacer algo productivo
En vez de hacer algo productivo, como limpiar o trabajar en casa, acostarte a dormir. No te sientas culpable, eres libre de hacerlo, no siempre hay momentos para descansar, pero sí para la limpieza general.
En iMujer nos interesa tu opinión sobre estas cosas para no sentirnos culpables: ¿Qué otra cosa crees que puedes hacer sin sentir que debes rendirle cuentas a tu conciencia? ¡Escribe tu comentario!